Si eres cristiano desde pequeño alguna vez escuchaste ésta frase, pero realmente ¿no te parecía algo un tanto aburrido? Yo pensaba woow realmente no voy a tener tiempo para jugar, comer o reírme y esto es algo que dio vueltas en mi cabeza y en mi corazón por muchos años. Lo que haremos ahora es explicar algo de esto.
Fuimos diseñados (creados) para ser adoradores, ahora esto no quiere decir que nos pasemos todo el día cantando. Lo bonito de esto es que tenemos libertad absoluta para decidir a qué adorar (familia, trabajo, dinero, personas, música) y en esta libertad es que empezamos a entender un poco el sentido de “adorando por la eternidad”
Cuando nos acostumbramos a una forma de adorar (cantar, una cuestión de horas durante los servicios, nuestros devocionales) esto se vuelve una cuestión rutinaria, es el momento perfecto para que busques otra manera de hacerlo, porque probablemente Dios ya no se mueva como antes, esto trae confusión, pero es ahí donde empezamos a encontrar el sentido de la adoración. Es un error definir a Dios por una forma en la que él se manifiesta.
Entonces podemos decir que la mayoría de las cosas que nosotros aprendemos de dios es en el ámbito de la adoración, la sanidad, el escuchar a dios, de aprender las escrituras, el oír al espíritu santo.
La adoración es un estilo de vida. Tú puedes estar adorando en tu trabajo, en tu universidad, en tu familia y en lo que sea que estés haciendo. El asunto está en siempre entender que él es el número uno.
Autor: BEZION
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